Entrevista a Juan Mascardi

Entrevistador: ¿Qué significa para usted NarrativasLab?
Juan Mascardi: Para mí es uno de los proyectos más interesantes de la UAI desde que estoy como docente incluso. Yo arranqué como docente en el 2001, es el trabajo en donde más tiempo estuve en mi vida, pero desde que tanto Aníbal (Rossi) como Marcelo (De la Torre) lo motorizaron hace tres o cuatro años atrás, para mí, como director de carrera, son esos proyectos que a uno lo incentivan, le abren la mente, que son para repensar incluso la gestión académica, porque creo que este es el verdadero espíritu de lo que uno cree que es la educación: la cuestión horizontal, el docente a la par del estudiante, la construcción conjunta, el desarrollo entre mismos estudiantes, y ahora este año que se suman desde Periodismo, pero ya el año pasado se habían sumado los estudiantes de Ingeniería en Sistemas, así que a mí me parece que hoy por hoy cuando nos pensamos como profesionales ya no nos habilita solamente un título, tal vez nunca haya sido así pero ese era el estigma de años atrás, sino lo que nos habilita es poder pensar en proyectos colectivos, y esos proyectos colectivos son sí o sí interdisciplinarios; se habla mucho de la polivalencia profesional, la polivalencia periodística, tener habilidades multitareas, pero eso no significa que las ejecutemos solos; y cuando pasa esto yo me pongo muy feliz, muy contento, es uno de los días más felices de la universidad.

E: ¿Y qué se espera ver en este evento?
JM: Yo siempre espero sorprenderme, porque siempre pasa algo que a uno lo sorprende, así que me dejo llevar. También es un lindo debate nuestro desde la docencia, porque hay mucho entusiasmo, y tal vez es difícil sostener ese entusiasmo durante toda la carrera, entonces hay que pensar que todos estos proyectos prosperen y que los estudiantes se sientan contenidos no solo por los docentes sino también por la institución.

E: ¿Se piensa repetir la experiencia de NarrativasLabs el próximo año?
JM: Ya que este sea el tercer año uno empieza a sentir que hay una tradición, y cuando se empieza a generar esa tradición es difícil de torcer. En ese sentido yo auguro a que continúe muchos años más.